Ingestas recomendadas de carne de vacuno, en base a la evidencia científica actual

 

 

Una alimentación variada y equilibrada contribuye a mejorar el estado de salud. La selección de las ingestas óptimas de los diversos alimentos ha demostrado reducir el riesgo de mortalidad total y puede conducir a un cambio considerable en el riesgo de muerte prematura. Los profesionales médicos deben asesorar a los pacientes para establecer recomendaciones y pautas de estilo de vida adaptadas a sus características físicas. Así, la carne de vacuno es un alimento rico en proteínas (tal como hemos mencionado en diferentes artículos)  gracias a la presencia de aminoácidos esenciales.

El aporte de vitaminas del grupo B y minerales, como hierro, potasio, fósforo y zinc es vital para nuestro organismo y ofrece beneficios cuando tenemos carencias.

La Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) aconseja un consumo de carne roja moderado y enfatiza su valor nutricional, dentro de una dieta variada y equilibrada como la mediterránea.

La Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC) para la población española es aún más específica para las carnes rojas, puntualizando que se debe elegir “productos de excelente calidad, con procedimientos culinarios sin contacto directo con el fuego y siempre con el acompañamiento de una guarnición de hortalizas frescas”.

Se recomienda, por tanto, el consumo moderado de carnes rojas como la de vacuno «de tres raciones a la semana, priorizando las piezas magras”.

Fuente: “Importancia de la carne de vacuno en la alimentación de los españoles”, guía editada por SEMERGEN, Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria.

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